«A propósito del día Internacional del Yoga»
Muy a menudo afrontamos la enfermedad como un campo de batalla, y en esa lógica, obviamos el mensaje y la información que ésta trae consigo.
Por qué no invertir esa energía vital en comprender y aceptar lo que tiene que decirnos? Por qué no verla como una gran oportunidad de cambio y de transformación? Por qué no cambiar hábitos, esquemas mentales y crear la extraordinaria posibilidad de nuevos espacios? A fin de cuentas, la salud va más allá de la ausencia de dolencias o enfermedades. La salud en su sentido más significativo es equilibrio, es armoniía y es directamente proporcional a la manera de gestionar todos los ámbitos de nuestra vida: el físico, el emocional, el mental y por supuesto, el espiritual.
Cuando el diagnóstico es Alzheimer (o cualquier otro que consideremos definitivo) cae como una losa sobre la persona que lo padece y su familia. Una vez recorrido el camino de la comprensión y la aceptación se pueden buscar alternativas, que junto al tratamiento médico indicado, puedan mejorar aún más la calidad de vida del paciente, y en este caso, retardar la pérdida de sus facultades cognitivas y de memoria.
En el Centro de Medicina Integrativa Arjuna (Tortosa) trabaja desde hace años un equipo multidisciplinar dirigido por el Dr. Tomás Álvaro Naranjo que aborda la salud de manera integral y donde la disciplina del Yoga tiene su espacio. Y así fue como Alba llegó hasta mí.
¿Qué podría ofrecerle? Mi Maestro dijo al respecto: «Los beneficios de una práctica correctamente aplicada y particularmente el Satyam Yoga System es indiscutible en el hecho que ayuda al paciente a estar conectado con su cuerpo y su respiración. A través de las posturas y del movimiento que nos conducen hasta ellas el practicante desarrolla propiocepción y un control respiratorio que regula y armoniza su ritmo cardíaco y sus frecuencias cerebrales. La respiración consciente es capaz de armonizar el cuerpo físico aquietando la mente y sublimado las emociones, creando estados de profunda calma y serenidad. Las dos cosas: movimiento y respiración por un lado y el mantenimiento de la postura y respiración por otro, provocan que el practicante se sitúe de manera ineludible en el presente. La práctica le ayuda a no poder abstraerse de su realidad y le obliga a situarse en el aquí y el ahora, al menos el tiempo que dura la clase. Por otra parte, el criterio que sigue el Satyam Yoga System equilibra el sistema nervioso y tiene una importante incidencia en el sistema endocrino. Estimula y regula la glándula pineal que es una de las más afectadas en esta enfermedad». (Sandânanda, Maestro y formador de profesores de Yoga. Creador del método Satyam Yoga System)
Teniendo en cuenta las enseñanzas de mi Maestro y formador, planteo cada sesión personalizada y enfocada en:
- Movimiento consciente de las articulaciones para personas de edad avanzada.
- Serie de posturas donde podamos trabajar la flexibilidad desde la relajación, la apertura, la expansión y el desbloqueo.
- Aumentar la capacidad respiratoria creando espacios internos a través de una correcta alineación corporal que garnatice una óptima circulación de la energía.
- Tècnicas de relajación consciente que ayuden a rebajar los niveles de ansiedad.
- Meditación y trabajo con el sonido.
Luego está Alba y su propia experiencia tras cada sesión …. Voy a resumirla en estas palabras suyas:
«No sé explicarte pero aquí suceden muchas cosas. Llego a relajarme tanto que el ruido que traía encima desaparece. Me siento tan ligera». Y sonríe.
Me cuenta que nació hace 83 años en las montañas del Coll de l’Alba en plena guerra civil y que siempre fue consciente del contraste: la belleza del entorno y la crueldad de la guerra. «Pero mis ojos se fijaron en la naturaleza, el sol, la luna y las estrellas y hasta ahora contemplo esa maravilla que al nacer ya me impresionaba».
Para Alba y todas las personas con las que he crecido compartiendo la práctica y la belleza en Yoga.
Asirys Lappin